Esto es una monja que se sube a un autobús para irse al convento y se sienta, en la próxima parada se sube un hippie y éste la ve y le dice:

- Quieres follar conmigo? - Hippie.
- Lo siento pero no estoy casada con dios. - Monja

A esto que la monja asustada se baja del autobús y solo quedaron el hippie y el conductor y el hippie se iba a bajar cuando el conductor le dijo que se acercara, lo hizo y le dijo:

- Si te quieres follar a la monja debo decirte que TODOS los Martes va al cementerio a las 23:00 para rezar a Dios si te apareces vestido como si fueras Dios y le pides follar lo más seguro es que lo haga.

Llega el Martes a las 22:50 y el Hippie llega al cementerio vestido de Dios a lo que escucha pasos y se esconde detrás de una lápida y espera, era la monja,
entonces ve como se arrodilla delante de una tumba y empieza a rezar. Entonces el Hippie salta encima de la tumba y le dice:

- Si quieres que te escuche todas tus plegarias te tengo que follar!!!!!!

- Está bien ... pero que sea por detrás que quiero conservar mi virginidad. Entonces la monja se sube el hábito y pone el culo para que Dios lo folle.

Al acabar el Hippie disfrazado empieza a reirse y la monja extrañada le pregunta porque se rie y éste le contesta que no era Dios era el hippie disfrazado. La monja se queda pero al cabo de un rato se empezó a reir más que el hippie y éste más extrañado que la monja le preguntó que le
pasaba y la monja le dijo que no era la monja era el conductor del autobús que le había engañado.

- Se cuenta mejor en persona y lo siento por escribir de esta forma tan literaria pero es que ya no me acuerdo de como escribirlo.